Por desgracia, existe todavía una cierta estigmazitación de las personas con pérdidas auditivas y el uso de audífonos. Pero a veces son ellos mismos – los afectados – que se consideran minusválidos o extraños. Según el dicho: “la pérdida de visión nos aleja de las cosas y la pérdida de audición nos aleja de las personas”, este estigma no proviene de los audífonos, sino del hecho de no poder oir y comunicar como los demás. Se puede decir que para mucha gente, tu problema de audición parece más extraño que tus audífonos modernos. Además, acordate que entre el 5% y 10% de cualquier población en el mundo tiene un problema auditivo, ¡no estás solo!
Sorpresivamente, esto no pasa con los problemas de visión. Al contrario: por ejemplo, usar lentes algunas veces se reconoce como un símbolo de inteligencia, y los diseños modernos de los lentes atribuyen a los portadores un estilo propio, diferente. La imagen negativa de la mala audición existe más bien en las cabezas de los afectados mismos y no tanto en los demás. Pero, hay una gran cantidad de personas con pérdidas auditivas que están lejos de sentirse inferiores o fuera de la vida activa. A continuación presentamos algunas celebridades con problemas de audición que han tenido éxitos extraordinarios en su vida. Son ejemplos que ayudan a aumentar las ganas de oír mejor.
Aunque la capacidad auditiva disminuya lentamente, en un principio las sensaciones auditivas habituales permanecen inalteradas. Así, en las primeras etapas solo se ven afectadas las frecuencias altas; por ejemplo, el susurro del viento o el gorjeo de los pájaros son cada vez más bajos, hasta que acaban desapareciendo por completo de la recepción auditiva habitual. Después desaparece cada vez más la comprensión del habla, en un primer momento solamente en entornos ruidosos.
Las consonantes sordas agudas dejan de distinguirse, lo que hace que el afectado tenga que volver a preguntar o se produzcan malentendidos. Además, el cerebro trata de completar lo que no se oye y se fatiga rápidamente.
Existen dos tipos fundamentales de disminución auditiva:
Así pues, resulta especialmente importante interpretar estos síntomas en el estadio inicial de una pérdida de audición. Es verdad que nuestro cerebro es capaz de compensar modificaciones o trastornos de la capacidad auditiva durante un período de tiempo más o menos largo, pero a largo plazo pierde la capacidad para detectar y descifrar las señales acústicas.
El resultado: el cerebro tiene que empezar a aprenderlo todo de nuevo. Por este motivo, los especialistas en audición recomiendan utilizar audífonos a su debido tiempo antes de que se produzcan los primeros problemas de comunicación y, con ello, las limitaciones en la calidad de vida.
Tu oído es único y tu capacidad auditiva personal sólo puede comprobarse con una prueba de audición, una audiometría profesional. Consultá con una fonoaudióloga o medico otorrinolaringólogo y concertá una cita para llevarla a cabo.
La audiometría tonal mide los umbrales de audición. En esta prueba uno esucha tonos de diferentes frecuencias e intensidades, y al final se determina el umbral de percepción (o sea oír los tonos muy bajos) y el umbral de desconfort (la intensidad máxima que podés aguantar). Además de una audiometría por vía aérea (con auriculares o con parlantes en campo libre) se evalúa la percepción por vía osea, un componente esencial para obtener un cuadro completo de la capacidad auditiva. Todas estas pruebas se efectúan con tonos puros, que son informaciones audiométricas objetivas.
Por otro lado hay que comprobar la comprensión de las palabras. Esta prueba se llama logoaudiometría y mide el nivel de discriminación del habla (palabras y frases) con diferentes niveles de intensidad. El porcentaje de las palabras y frases entendidas que se entiende y repite correctamente indica el grado de discriminación del habla.
Disponiendo de ambas informaciones – la audiometría tonal y la logoaudiometría – conoceremos bien la capacidad auditiva y podremos hacer un pronóstico objetivo respecto a un posible equipamiento auditivo.
Aparte de estas pruebas esenciales existen otros diagnósticos más bien clínicos de nuestra audición u oído:
Un punto fundamental para definir un equipamiento auditivo adecuado es el grado de la pérdida auditiva que se deriva directamente de los umbrales de la audiometría tonal. Los valores de los umbrales se indican en decibelios (dB), las frecuencias en Hertz (Hz), y básicamente se distinguen cuatro categorías principales.
Los casos más destacados son:
Con respecto a la audición humana y todas las patologías que puedan ocurrir, existen casos especiales que requieren diagnósticos y tratamientos particulares de parte de los especialistas de oído así como de las empresas que brindan soluciones auditivas.
¿Cuáles son estos casos que necesitan una atención especial?
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